El sector del vino español, símbolo de tradición y referente mundial

El sector del vino juega un papel fundamental en nuestro país, no solo en términos económicos, por su contribución a la actividad, el empleo o las exportaciones, sino también por la amplia extensión de su cultivo y su arraigo territorial, lo que lo convierte en motor de conservación medioambiental y de desarrollo rural. España es el segundo exportador mundial de vino en volumen y el tercero en valor, si bien los últimos años hemos asistido a una mayor penetración en Norteamérica y Asia, mercados que compran vino de mayor importe. Tras la crisis de la COVID-19, bodegas y cooperativas deben afrontar importantes retos de medio plazo y adaptarse a los nuevos hábitos de consumo de un público más joven, digitalizado y concienciado con el medio ambiente. En esta estrategia se enmarca la apuesta por los cultivos ecológicos, las ventas on-line o el enoturismo.

Contenido disponible en
5 de octubre de 2021
p 28
La cadena de valor del sector vitivinícola

La cadena de valor del amplio sector vitivinícola se inicia con la plantación y el cuidado de la vid (viticultura) y, una vez obtenido el vino (vinicultura), continúa con su distribución y comercialización. Así, el sector está formado, en primer lugar, por más de 550.000 explotaciones vitícolas,20 que se caracterizan por tener un tamaño medio muy reducido (apenas 1,70 hectáreas). Además, el 68,8% no supera la media hectárea y solo un 3,9% posee más de 10 hectáreas.

En segundo lugar, encontramos las más de 4.000 empresas productoras de vino.21 El modelo cooperativo, muy arraigado en el sector,22 representa alrededor del 60% de la producción en términos de volumen, si bien en términos de valor destacan los grandes grupos bodegueros, con una oferta más diversificada y una importante actividad exportadora. 

Por último, existe una amplia red de establecimientos de distribución y venta de productos relacionados con el vino. Las bodegas pueden vender directamente al consumidor final o a través de otros canales, principalmente el HORECA (hoteles, restaurantes y cafeterías) y el comercio minorista (supermercados e hipermercados), que representan el 31% y el 35% de las ventas totales en volumen, respectivamente (datos prepandémicos de 2018). No obstante, el precio medio del vino vendido a través del canal HORECA es casi cuatro veces superior al que se vende en tienda, de modo que las ventas en términos de valor en este canal superan el 50% del total, tal y como puede observarse en el gráfico de la siguiente página. 

  • 20. Véase MAPA (2021), «Informe sobre aplicación del régimen de autorizaciones de nuevas plantaciones de viñedo 2020 y potencial de producción vitícola en España». https://www.mapa.gob.es/es/agricultura/temas/regulacion-de-los-mercados/informeviticola2021_tcm30-561191.pdf
  • 21. Las empresas productoras de vino representan el 2,4% de las empresas manufactureras y el 13,6% de las empresas de alimentación y bebidas (Estadística Estructural de Empresas 2019, INE).
  • 22. El 21% de las cooperativas del sector agroalimentario en España se dedican al vino, siendo la producción vitivinícola la quinta más importante dentro del cooperativismo en términos de facturación directa, con el 7% del total en 2019. OSCAE (2020), «El cooperativismo agroalimentario español. Informe socioeconómico 2019», Cooperativas Agroalimentarias de España.
La distribución minorista concentra la mayor parte de las ventas de vino en volumen,

pero los vinos de mayor valor se venden en hostelería, restauración y, sobre todo, vinotecas y clubs.

Entre el resto de los canales de distribución, las ventas en vinotecas y clubs de vinos apenas suponen el 6% del volumen total, pero concentran los vinos de mayor precio (con denominación de origen, de gama media y alta) y representan cerca del 13% en valor. En el extremo opuesto, con los precios más económicos, se sitúan las ventas directas desde bodega (18% en volumen y 4,5% en valor).

Consumo de vino en España por canales de distribución         

Consumo de vino en España por canales de distribución
La crisis de la COVID-19 ha provocado importantes cambios en los hábitos de consumo de vino

En 2020 el consumo nacional de vino se desplomó hasta los 9,1 millones de hectolitros (–17% respecto a 2019), la cifra más baja de la serie, muy afectado por la cancelación de espectáculos y eventos y, sobre todo, por las limitaciones en el canal HORECA. Además, la incidencia de la pandemia fue relativamente elevada en Madrid y Barcelona, los dos principales centros de consumo. 

p 25
Los consumidores están cada vez más preocupados

por la salud, la sostenibilidad y el medio ambiente.

Una parte del consumo que se dejó de efectuar en hostelería y restauración se trasladó al ámbito de los hogares, mediante compras en el comercio minorista, que creció de forma extraordinaria y se convirtió en el principal canal de venta, con el 47,5% del total.23 Así, el gasto de los hogares españoles en vino aumentó un 15,3% en 2020, tras haber aumentado un 15,7% en 2019.24 Más allá del impacto de la pandemia, el sector debe adaptarse a los cambios de preferencias de los consumidores, cada vez más preocupados por la salud, la sostenibilidad y el medio ambiente. En general, estos cambios se traducen en un consumo más hogareño, «saludable» y que valora más los cultivos ecológicos o los envases reciclables. Las bodegas y establecimientos de comercio especializados se están reinventando, desarrollando formas de venta alternativas, como las entregas a domicilio o el canal on-line; este último también como plataforma para ofrecer experiencias virtuales (visitas y catas). 

  • 23. También aumentaron su participación los clubs de vinos, vinotecas y, sobre todo, las ventas directas desde bodega. Véase OeMv (2021), «Estudio de la evolución de los canales de venta de vino en España». De esta encuesta realizada a 110 bodegas, se desprende que 8 de cada 10 redujeron sus ventas en 2020; sufrieron más (i) por tamaño, las pequeñas, que no pudieron compensar las pérdidas en el canal HORECA, a pesar de que reforzaron sus ventas directas, y (ii) por tipo de vino, los de precios superiores.
  • 24. Datos de la Encuesta de presupuestos familiares, INE, 2020.
Posición preponderante en el mercado global del vino

El vino es uno de los principales productos exportados por la industria agroalimentaria española, solamente por detrás de la carne de porcino, los cítricos y el aceite de oliva. El retroceso de las exportaciones de vino en 2020 (del –3,1%), el segundo consecutivo tras el –7,4% del año anterior,  se explica, fundamentalmente, por el ajuste de la demanda en plena pandemia (la OIV25 estima que el consumo mundial de vino cayó cerca de un 3%), aunque también influyeron los aranceles impuestos en 2019 por EE. UU. a las ventas de algunos productos agroalimentarios europeos, incluido el vino español, que provocaron una caída del 9,9% en valor y del 6,1% en volumen de vino español exportado a EE. UU en 2020.26 Por ello, el acuerdo recientemente alcanzado entre EE. UU. y la UE para suspender los aranceles durante, al menos, cinco años es una excelente noticia para el sector vinícola.

  • 25. Organización Internacional de la Viña y el Vino.
  • 26. Con todo, EE. UU. todavía recibe un 10,3% de las exportaciones de vino españolas.
Una de las principales debilidades de la exportación vinícola española

es el bajo precio medio, que nos sitúa a la cola en la UE en cuanto al valor añadido de los vinos exportados.

Aunque España es el segundo exportador mundial de vino en volumen, por detrás de Italia, en valor nos superan Italia y, sobre todo, Francia, que vende en torno a un 33% menos de vino, pero factura tres veces más: esto se explica por los precios medios, cinco veces superiores en el caso de nuestros vecinos.27 

Si bien el bajo precio medio genera un problema de margen de beneficio para muchos negocios, hay que tener en cuenta la heterogeneidad del sector, con gran diversidad de regiones productoras, variedades, sistemas de crianza y bodegas, lo que se traduce en distintos segmentos de calidad y precio. El problema del bajo precio respecto a la media mundial es generalizado por categorías, pero el granel juega un importante papel: sus exportaciones representan el 52,4% del total en volumen, pero solo el 17,4% en valor, lo que da un precio medio de apenas 0,44 euros/litro, cinco veces menos que en el caso de los vinos envasados (2,32 euros/litro).

  • 27. Véase OeMV (2021), «Principales exportadores mundiales de vino, año 2020».

Principales países de destino de las exportaciones de vino agrupados según el precio medio del vino español que importan

Principales países de destino de las exportaciones de vino agrupados según el precio medio del vino español que importan
Nota: Grupos TARIC 2204 y 2205. Fuente: CaixaBank Research, a partir de datos de Datacomex.

El bajo precio de exportación en términos agregados oculta importantes diferencias por destinos. Gran parte de las exportaciones de vino español se siguen dirigiendo a países con un precio bajo, sobre todo europeos (Francia, Alemania, Portugal e Italia, entre otros), cuyo menor precio está relacionado con la venta de vino a granel. Si bien el precio medio (más barato) que paga este grupo de países se ha mantenido relativamente estable en los últimos años, lo cierto es que pierden peso sobre el total de las exportaciones en términos de valor. Por el contrario, los países que pagan un precio medio más alto (entre los que se encuentran EE. UU., Suiza y Canadá), no solo han aumentado dicho precio, sino también su peso, tal y como se puede observar en la tabla superior.

El sector exportador vinícola

se está reorientando geográficamente hacia mercados con mayor precio medio. 

Si centramos el análisis de los principales países de destino (los 15 primeros, que acaparan más del 80% de las ventas totales), el comportamiento de las exportaciones en los últimos años (2015-2020) ha sido, en líneas generales, positivo, y donde destacan Canadá y Suecia por su mayor dinamismo en términos de valor (aunque también crecen en volumen). En cambio, las ventas destinadas a los principales países europeos se muestran más contenidas. Mención aparte merece Suiza, que, a pesar de retroceder en términos de volumen, crece en valor gracias a un elevado y creciente precio medio por litro (ligeramente por encima de los 5 euros en 2020).

Exportaciones de vino español al top 15 de destinos

Variación anual media en valor (%)
Exportaciones de vino español al top 15 de destinos
Notas: El tamaño de las burbujas indica el precio medio del vino exportado. Datos promedio de 2015 a 2020. Fuente: CaixaBank Research, a partir de datos de Datacomex.

En definitiva, en los últimos años asistimos a una mayor penetración en Norteamérica y Asia, mercados que compran vino de más valor, y una progresiva reducción de la dependencia del mercado europeo: desde el año 2000, Europa ha reducido en casi 12 puntos su peso en las exportaciones españolas de vino. 

p 28
Impacto social del vino

Además de su contribución en términos económicos, el fuerte arraigo territorial convierte el sector del vino en motor de desarrollo rural. En cierto modo, la vitivinicultura contribuye a hacer frente al reto demográfico, ya que la actividad e ingresos que genera son clave para muchos municipios de reducido tamaño. Además, tiene una estrecha relación con el cuidado y conservación de los recursos naturales, ya que la supervivencia de los viñedos depende de la protección de las especies, ecosistemas y hábitats naturales. Mención especial merece la viticultura ecológica,28 que tiene un peso creciente en nuestro país: con más de 121.000 hectáreas en 2020, algo más del 13% de la superficie total de viñedo para vinificación, genera una producción estimada superior a las 441.000 toneladas, lo que sitúa a España como líder mundial en términos de producción ecológica de vino. 

El entorno de procedencia constituye un atributo que refuerza la experiencia de degustación del vino. En esto se basa la esencia de las denominaciones de origen, que integran elementos, tangibles e intangibles, ligados al territorio (clima, suelo, variedad de uva, tradición, prácticas culturales…) y que determinan la singularidad de cada vino.

  • 28. Básicamente, selecciona las variedades de uva más adaptadas a las condiciones locales, usa técnicas respetuosas con el medio ambiente en el manejo del suelo y de los cultivos y, en lugar de productos químicos como pesticidas y fertilizantes, emplea otros de origen orgánico (compost, abonos verdes o residuos de la propia cosecha).
El enoturismo contribuye a vertebrar el territorio

y dinamizar la economía de las zonas productoras de vino.

Un fenómeno en auge es el enoturismo, que ofrece una experiencia diferente en la comercialización de vino, mediante visitas a bodegas, jornadas enogastronómicas y actos culturales diversos. Aúna oferta vinícola y cultural, es complementario con el resto de la oferta turística, genera ingresos para la hostelería, la restauración y otros negocios locales y es poco estacional. Incluso podría verse impulsado por la crisis sanitaria, en tanto que es una actividad atractiva para personas que buscan lugares tranquilos no masificados, espacios abiertos y un mayor contacto con la naturaleza. En definitiva, el buen comer –y beber– es uno de los valores distintivos de nuestro país y el vino, la bebida más apreciada en el extranjero, asocia a la idea de España como destino turístico predilecto.

Principales indicadores del sector agroalimentario

Variación anual, salvo indicación expresa
Principales indicadores del sector agroalimentario