EUR/GBP
Las expectativas macrofinancieras para la economía británica apuntan a que la paulatina apreciación de la libra esterlina frente al euro y al resto de sus principales pares en los últimos trimestres debería prolongarse. Por un lado, el cambio de Gobierno en el Reino Unido debería suponer mayor estabilidad y crecimiento económico, con este último además coyunturalmente en mejor momento que en la eurozona. Esto, a su vez, debería favorecer la demanda de GBP a través de un mejor saldo por cuenta corriente (en no poca medida, por unas mejores relaciones comerciales con la UE) y una mayor atracción de inversión extranjera directa y de flujos de cartera. El principal riesgo a la baja para la GBP es que la desinflación pueda no seguir su curso si el crecimiento salarial en el Reino Unido se mantuviera en las actuales tasas, elevadas tras años de erosión del poder adquisitivo de las familias.