
EUR/USD
El dólar cambia de ritmo: tras depreciarse un 13% frente al euro en el primer semestre, frenó su caída en verano y ha recuperado algo de terreno desde septiembre. En próximos trimestres, las previsiones de crecimiento e inflación apuntan a un dólar algo más débil, aunque persisten factores que podrían sostenerlo: la resiliencia económica de EE. UU., unos tipos reales más altos en EE. UU. (tras moderarse las expectativas de inflación) y una importante recuperación de su papel como activo refugio.

