La inflación se emplazó en el 2,7% en junio, 0,1 p. p. por encima de lo adelantado el pasado día 29 de junio por el INE, manteniéndose así 3,2 p. p. por encima de lo observado en diciembre de 2020. La inflación general se sitúa así por segundo mes consecutivo en el nivel más elevado observado desde febrero de 2017. El aumento de los precios se explica, por un lado, por la evolución al alza de los precios de la electricidad y, por otro, por el aumento de los precios de alimentos elaborados. En cambio, la inflación subyacente (general sin energía y alimentos frescos) se estabilizó en el 0,2%, con un aumento de los precios de bienes industriales contrarrestado por el descenso de los precios de los servicios. Con este dato, la inflación general se mantiene en su nivel más alto en cuatro años y persiste la trayectoria moderada de la inflación subyacente. La publicación del dato se situó por encima de la previsión de CaixaBank Research.